"El Crimen de Isa Dobles"


Creo que se llama Isabel Oropeza, creo… pero es más conocida por el seudónimo de “Isa Dobles”.  Para muchos, una excelente periodista venezolana. Para otros, un oscuro personaje más doble que su remoquete.  Lo cierto es que me ha llegado, por diferentes vías, un artículo que publicó hace unos días, titulado de la siguiente manera: “Callar La Historia es Criminal”.  Si no lo han leído, pueden hacerlo bajándolo de la siguiente dirección virtual: http://www.gentiuno.com/articulo.asp?articulo=10159  Se incluyen foticos.

Isa Dobles tuvo un padre digno, Alejandro Oropeza Castillo: digno y guapo (arrecho), además. ¿Qué se habrán hecho los venezolanos dignos y guapos como Oropeza Castillo?  El padre de Isa jamás hubiera pertenecido a la MUD, estoy seguro.  Pertenecía a una estirpe muy especial, esa que nos recuperó la democracia y nos la supo mantener, a punta de fuego y sangre.  Oropeza Castillo estaba en el mismo lote de hombres como Leonardo Ruiz Pineda, por ejemplo, quien cayó abaleado por las huestes de la tiranía un 21 de octubre de 1952.  Gente que no creía en eso de estar sacando tiranos a punta de votos.

No sabemos qué diablos le pasó a Isa, criada en un hogar digno, democrático y cristiano.  No lo sabemos.  Es una pregunta que merece ser contestada por un sociólogo, psicólogo o loquero: ¡no lo sabemos!

Después de haber visto tantos ejemplos de dignidad en su hogar; después de haber escuchado de boca de su padre – quien fuera gobernador del Distrito Federal en la época rancia de las guerrillas castro-estalinistas: después de haber conocido los horrendos y cobardes crímenes de pobres “policías de punto”, infelices que se las jugaban por tres reales y cuartilla… se volvió atea y ñángara: ¡castro-estalinista!

Podríamos decir que Isabel Oropeza traicionó, no solamente los principios de su digna e hidalga familia: ¡traicionó a su patria!  Siempre fue una admiradora del jefe máximo de esos psicópatas, quienes, como el ahora-fallecido Clodosvaldo Russian, se propusieron matar un policía por día en la ciudad de Caracas, precisamente, cuando su padre era gobernador… tal y como ella misma lo está admitiendo en el artículo arriba mencionado, publicado por la Dobles.

Isa Dobles, incluso, no solamente vivió en Cuba bajo el amparo de su gran benefactor y amigo, Fidel Castro: tuvo un programa de televisión en la isla, en el cual despotricaba contra todos aquellos principios que defendió, con su vida, su recordado e ilustre padre.  Luego de un encontronazo de tipo personal, dicen que con el director del ICAIC (Instituto Cubano del Arte y la Industria Cinematográfica), regresó a Venezuela.  No me acuerdo bien el año, pudo haber sido en el 81 o en el 82, tuvimos – ella y yo – un altercado verbal en las oficinas de CORPA PUBLICIDAD, porque todavía amaba la “revolución cubana” y añoraba su regreso a la isla-prisión.

Ayudó al sátrapa de Sabanetas a llegar al poder, a sabiendas de todo el “lacrage” que le acompañaba, muchos de ellos antiguos asesinos de venezolanos, que entre las víctimas se encontraban civiles, militares y policías: ¡todos venezolanos!  De una manera criminal, a través de estos años, ha guardado un silencio absoluto.  Sabrán Dios y todos los santos, qué la apartó de la “revolución bolivariana”.

Desde su conversión al castro-estalinismo, por allá… por los años sesenta, hasta que "se dio cuenta" de que es un sistema perverso y destructivo, han sido muchos los crímenes que registra esa infausta historia, escrita con la sangre de venezolanos y cubanos.  En el año 61 se produjo en Cuba la tristemente-famosa “Masacre de la Rastra de la Muerte”, donde jóvenes soldados de la Brigada 2506 fueron introducidos en una rastra (una gandola), provocándoles la muerte por asfixia a no pocos de ellos.  http://www.autentico.org/oa09370.php

Durante la época fuerte de las llamadas “misiones internacionalistas” (intervención de Castro en los conflictos armados del continente africano), en las décadas de los sesenta y  setenta, decenas de miles de cubanos eran fusilados en el paredón castro-estalinista, no sin antes habérseles extraído hasta la última gota de su sangre, para ser empleada en las guerras que Castro fomentaba y mantenía en África.  Morían gritando: “!Viva Cristo Rey!”  http://cubaarchive.org/home/index.php?option=com_content&task=view&id=98&Itemid=96&lang=sp

En julio de 1994, cuando todavía Isa "no había caído en cuenta" del horror castro-estalinista,  se produjo la “Masacre del Remolcador Trece de Marzo” en Cuba, en la que Castro masacró a diez niños entre las edades de 5 meses y 12 años; a 18 jóvenes, entre las edades de 17 y 35 años y a 9 adultos, entre las edades de 38 y 50 años - http://www.cubaliberal.org/encuba/21072005-Represion_a_Familiares_de_victimas_Remolcador_13_de_Marzo.asp  Isa, que yo sepa, guardó silencio y cuando en 1998 llegó la hora de elegir a un nuevo presidente en su tierra natal, apoyó al pupilo del mayor genocida que haya parido madre.

En febrero de 1996, dos años más tarde de la “Masacre del Remolcador Trece de Marzo” y dos años ANTES de apoyar al sátrapa de Sabanetas, Castro derribó – en aguas internacionales – dos avionetas desarmadas de “Los Hermanos al Rescate”.  http://www.aguadadepasajeros.bravepages.com/menu2/rescate1.htm Total silencio por parte de la Dobles.

Mientras tanto, a lo largo y ancho de los años en los cuales Isa Dobles amaba a Castro y a su “revolución”, millones de familias cubanas fueron destruidas y separadas; decenas de miles de cubanos murieron en el Estrecho de La Florida, intentando llegar a tierras de libertad en las tripas de camiones viejos; siguieron los fusilamientos en los paredones de Castro (más de 70mil), millones de hombres y mujeres dejaron su juventud en las atroces prisiones infrahumanas castristas y se fomentaron guerrillas sanguinarias en muchos lugares del planeta Tierra… sin contar la destrucción sistemática y estratégica de esa tierra noble en la cual ella vivió unos años, los suficientes como para haberse dado cuenta de cómo funcionaba ese “mar de felicidad”, con el mayor índice de suicidios en América, el mismo mar que Chávez le prometió a su pueblo: "promesa" (o amenaza), que está cumpliendo a cabalidad.

Isa Dobles fue testigo de cuatro éxodos masivos: el del llamado “Vuelos de la Libertad”,  a partir de la mitad de la década de los sesenta http://www.elnuevoherald.com/2008/12/16/340999/tras-las-huellas-de-los-vuelos.html; el éxodo de Camarioca, por la misma fecha http://www.miscelaneasdecuba.net/web/article.asp?artID=17508; el del Mariel, en 1980 http://unabrevehistoria.blogspot.com/2007/11/exodo-desde-mariel.html, y la llamada “Crisis de los Balseros”, a mediado de la década de los noventa http://prodecu.org/documentos/exodo.htm.


Seguramente que Isa Dobles escuchó, en la década de los sesenta, la triste historia de miles de niños cubanos, de edades entre 4 y 15 años, quienes eran enviados solos sin sus padres a Miami, para evitar que fuesen adoctrinados por los íncubos de Castro, rescatados por el plan "Pedro Pan", organizado en EEUU por la iglesia católica:


Así como ahora, después de muerto, Isa Dobles levanta su voz para acusar las andanzas de un inmisericorde psicópata homicida, Clodosbaldo Russian, debería de hacer lo mismo con ese montón de genocidas que pulula, vivito y coleando, dentro y fuera del régimen de Castro en Venezuela; debería de levantar su voz (o su pluma) para denunciar las inherencias militares del ECO (Ejército Cubano de Ocupación), uniformados de Castro que operan desde el cuarto piso del antiguo Hotel Anauco Hilton (hoy Hotel Alba), en pleno corazón de la ciudad capital de Caracas y bajo las órdenes directas del “Carnicero de Luanda”, un magnicida muchísimo peor que lo que en vida fue Russian: el Coronel Francisco Javier Salado Villacín, quien se vanagloria de haber dirigido en 1976 la matanza, en Luanda (capital de Angola) de varias decenas de seres humanos: ¿cuántos policías fue que, según Isa, mató Russián?.  Para no incurrir en un crimen, aprovechando que todavía vive, debería denunciar al supuesto diputado y vicepresidente del Parlamento Latinoamericano (Parlatino) por Venezuela, el supuesto venezolano Amilcar Figueroa (muchos aseguran que es colombiano, “electo” en las planchas del PSUV), solicitado activamente por la justicia colombiana por terrorista miembro importante de las FARC.  No debería descansar hasta no sacar del país a la chileno-cubana de origen alemán, Marta Harnecker, viuda del terrible Comandante Barba Roja, quien despacha DESDE HACE AAAAÑOS desde las oficinas contiguas a las del ECO, en el cuarto piso del Hotel Alba (http://infomedmedgeneral.blogspot.com/), se asegura que fue ella quien, en 1998, delató los "aires de poder" de su entonces-marido, el Comandante Manuel Piñeiro Losada. 


En Venezuela no hay un solo político de la "oposición", un solo DIPUTADO, un solo periodista que se atreva - siquiera - a mencionar indirectamente, a esos personajes de Castro, que operan impune y descaradamente desde nuestro país: Amilcar Figueroa, el Coronel Francisco Javier Salado Villacín o la "ideóloga" Marta Harnecker.  Son todos unos mapurites que saben a quién pean (zorrillos que saben a quién echarle el líquido fétido). 


¡Adelante, Isa!

Robert Alonso